La confianza es algo bastante complicado para muchas personas. Pero sin ella, es demasiado fácil caer en la madriguera de la duda y la negatividad. Y esto no sólo nos duele a nivel personal (ansiedad, depresión, pertenencia al club de los corazones solitarios), sino que también puede poner un freno a nuestro éxito profesional.

Todos y cada uno de nosotros tenemos autoestima. La autoestima está hecha de los pensamientos que tenemos sobre nosotros mismos y juega un papel en casi todo lo que hacemos.

Tener una autoestima saludable es realmente importante ya que te ayuda a tomar decisiones positivas en tu vida diaria, te da el valor de ser tu propia persona, tener buenas relaciones y te ayuda a enfrentar situaciones difíciles.

¿Sabías que el 87% de las personas que han sufrido de bullying sienten que esto tiene un efecto negativo en su autoestima?

La baja autoestima puede tener efectos dañinos en tu salud mental, tus decisiones sobre tu apariencia y, en última instancia, tu futuro. No es fácil que te guste cada parte de tu apariencia, pero atascarte en lo negativo puede realmente bajar tu autoestima.

Otros efectos de la baja autoestima incluyen:

  • Evitas situaciones difíciles.
  • Sensibilidad a las críticas.
  • Ansiedad.
  • Retirada de las situaciones sociales.
  • Eres reacio a confiar en ti mismo.

Si tienes poca confianza en ti mismo, ¿es posible hacer cosas que cambien eso? ¿Está tu autoconfianza bajo tu control?

Aunque no lo parezca, si tienes poca confianza en ti mismo, puedes hacer cosas para aumentar tu confianza en ti mismo. No es genético, y no tienes que depender de otros para aumentar tu autoconfianza. Y si crees que no eres muy competente, ni muy inteligente, ni muy atractivo, etc. …eso puede cambiarse.

Puedes convertirte en alguien digno de respeto, y alguien que puede perseguir lo que quiere a pesar de la negativa de los demás.

Puedes hacer esto tomando el control de tu vida, y tomando el control de tu autoconfianza. Tomando acciones concretas que mejoren su competencia, su imagen de sí mismo, puedes aumentar esa confianza en sí mismo, sin la ayuda de nadie más.

Es importante creer, en el fondo, que puedes cambiar. El cambio no necesariamente ocurre fácil o rápidamente, pero puede ocurrir.

DESAFIAR LOS MALOS PENSAMIENTOS SOBRE TI MISMO

Reemplázalos con pensamientos más positivos que celebren las cosas en las que eres bueno. Puedes hacerlo escribiendo una lista de al menos tres cosas que haces bien. Recuerda esta lista cuando empieces a sentirte deprimido, esto te ayudará a volver a la realidad.

CUIDARTE A TI MISMO

Comer bien y hacer ejercicio estimula las endorfinas, los opiáceos naturales del cuerpo, que te hacen sentir bien por dentro y estimula un estado de ánimo más positivo. Cuando haces ejercicio, alivias el estrés y te sientes mejor contigo mismo. Bailar un baile cursi en tu habitación o salir a correr alrededor de la manzana son formas estupendas de aumentar tu autoestima.

RELAJACIÓN

La constante sensación de estrés puede jugar un gran papel en la baja autoestima. Te hace sentir pensamientos negativos más a menudo, reduce tu confianza y probablemente te sentirás demasiado cansado para hacer ejercicio, ser sociable o hacer muchas de las cosas que te gustan.

Reducir el estrés dedicando tiempo a hacer algo que te resulte relajante es un gran punto de partida para hacerte sentir mejor. Esto puede ser cualquier cosa, desde tomar un baño, meditar, jugar, bailar en el interior, cantar… lo que sea; si funciona para ti, ¡funciona!

FIJAR OBJETIVOS

Tómate el tiempo todos los días para pensar en lo que te gustaría lograr. Luego fíjate metas realistas para cada día y haz un seguimiento de tu progreso anotando todos tus logros.

Sentirás una enorme sensación de logro cuando hayas marcado todo en tu lista del día.

AYUDAR A ALGUIEN

Puede ser un amigo, un miembro de la familia o incluso un compañero de clase que esté luchando con su trabajo o que lo esté pasando mal en la escuela. Podrías darles algún consejo o simplemente estar ahí para escuchar un problema.

Es sorprendente lo mucho que aumenta nuestra confianza cuando hacemos cosas desinteresadas: hacer una cosa a la semana para ayudar a otra persona sin esperar nada a cambio.

TOMAR UNA PERSPECTIVA DIFERENTE

Mira las situaciones difíciles desde ángulos alternativos. Intenta reemplazar pensamientos como “¿por qué debería molestarme?” con “no lo sabré si no lo intento”.

Al observar una situación a través de una lente más realista, te darás cuenta de que realmente puedes hacer lo que quieres, ¡sólo tienes que aplicar un poco más de positivismo!

PROBAR COSAS NUEVAS

Nuestros cerebros son muy buenos aprendiendo cosas nuevas y cuanto más cosas nuevas aprendes, mejor lo aprendes y es más probable que encuentres cosas que te apasionen.

RODEARTE DE GENTE QUE TE HAGA SENTIR BIEN

A veces nuestros amigos no nos hacen sentir bien, y eso está bien. Sólo necesitas pasar tu tiempo con otras personas que te aprecien y se preocupen más por ti. Ni siquiera es necesario que sean tus amigos, pero pueden ser familiares, amigos en línea o vecinos.

¿Y esos amigos que no ayudan a tu estado de ánimo? Averigua si son amigos tóxicos y piensa en intentar distanciarte de esas personas que te hacen sentir mal contigo mismo.

Puede ser un poco difícil al principio, pero aunque sean los chicos más populares de la escuela, ¡no vale la pena salir con ellos si te hacen sentir mal!

ACEPTARTE A TI MISMO

Nadie es perfecto. Todos tenemos problemas y todos tenemos defectos. Aprende a aceptar tus “defectos” o imperfecciones y a amarlas, porque son lo que te hace único.

La auto-aceptación es la clave para sentirse seguro. Cuando la gente te hace cumplidos, simplemente di “gracias” en lugar de hacerlos a un lado o contrarrestarlos con una negativa.

MANTENER RECORDATORIOS VISUALES DE LAS COSAS QUE TE HACEN SENTIR BIEN

Los recuerdos son una gran manera de ver todas las cosas geniales que has estado haciendo. ¿Qué tal si haces una “pared de la fama” en tu dormitorio con fotos tuyas y de tus amigos?